Señor de las Aguas | Origenes Ecuador

Atractivo cultural, turístico y gastronómico de la fiesta popular y religiosas del “Señor de las Aguas”

Nombre de la Localidad: Cabecera Parroquial de Colonche

Parroquia: Colonche

Provincia: Santa Elena

Nombre de la Fiesta: Fiesta popular y religiosa “Señor de las Aguas”

Fecha de Celebración: 30 de mayo

Platos de esta fiesta: Sancocho de pescado, pescado asado, seco de chivo, seco de gallina, arroz moro, humitas, dulce de papaya, bollo de maduro, tambor de yuca, tortilla de maíz, bolón de verde, tortilla de verde, pipián y chicha de maíz.

La provincia de Santa Elena, es una de las 24 provincias que conforman el territorio del Ecuador. Su capital es Santa Elena que está conformada por 6 parroquias en las que se asientan 68 comunas.

Colonche es una parroquia de la provincia de Santa Elena conformada por 18 comunas, que se encuentra ubicada al centro y norte de la provincia de Santa Elena. La Comuna Ayangue siempre ha sido el puerto de Colonche. A menos de 30 minutos se encuentra su cabecera parroquial del mismo nombre, poblado de pequeña extensión conocido por los oficios que realizan sus habitantes, ya sea en trabajo de pesca, de madera, comercio, agricultura o ganadería.

Un atractivo turístico de esta localidad es su iglesia, Santa Catalina de Colonche, que es una verdadera joya de la arquitectura en trabajos de madera. Aquí celebran a su santo Patrono el Señor de Las Aguas el 30 de mayo de cada año.

Según relatos de los habitantes de Colonche, indican que los antiguos conocían que ahí en Colonche, se encontró en una ciénega la Imagen del Señor de Las Aguas. (Alvaréz, 2001)

Base histórica de la fiesta

En territorio de la parroquia Colonche, la religión que predomina es la católica. Cada una de sus fiestas está relacionada con alguna figura católica con su santo patrono de la Iglesia Santa Catalina de Colonche. Según datos históricos la iglesia es una de las más antiguas de la provincia de Santa Elena, data de finales del siglo XVII (1600 – 1699) cuya edificación está construida totalmente de madera, a base de guayacán. La construcción de esta iglesia se desarrolla en un nivel que ocupan la nave principal y dos naves secundarias, con el campanario ubicado en el centro de la edificación desarrollado en tres niveles y rematado en un chapitel de madera, con el tiempo se han realizado trabajos de preservación y conservación, pero la estructura, altar, coro y campanario se conservan intactos según versión de los encargados de la iglesia. (Instituto Nacional de Patrimonio Cultural [INPC], s.f.)

La iglesia tiene una torre del campanario de aproximadamente 30 metros de altura con una escalera interna, dentro de la iglesia para poder acceder a la misma. A un costado de la iglesia existe un museo que guarda en su interior reliquias, estolas y libros de bautismo de los primeros indígenas nativos peninsulares convertidos al catolicismo en tiempos de los españoles.

Según narración de sus habitantes, se estima que la devoción del Señor de Las Aguas data de unos 300 años atrás, tiempo en que se construyó la primera iglesia de Colonche. Se conoce que en el lugar en el que hoy está asentada la iglesia, antiguamente había una poza de agua, donde se encontraron dos esculturas del Señor de Las Aguas, una de cuerpo entero (1,60 m. aprox.) y otra de medio cuerpo, talladas en madera. Desde aquí nace la devoción a estas imágenes, pues al Señor de Las Aguas, se le atribuye poderes especiales ya que concede buenos inviernos para que exista abundante cosecha y pasto para el ganado y los animales, las mismas que fueron muy intensas en épocas pasadas. (INPC, s.f.)

Existen diferentes versiones del porque la denominación del Señor de las Aguas. Habitantes cuentan que después de haber sido sacado del agua y llevado a la capilla, desaparecía y nuevamente era encontrado en el interior del lago, hecho que se habría repetido en varias ocasiones. Desde aquel tiempo se le dio el calificativo y desde entonces fue considerado como el “Dios de las lluvias”. (nicopeninsula, 2017)

Según Pezo,P.( 2016) menciona el relato del comunero Jorge Villao:

Dicen los veteranos que pasaba un señor de aquí de Colonche a eso de la medianoche, cuando vio un señor que se bañaba en una laguna que quedaba justo aquí donde está la iglesia. Ese joven fue a llamar a sus mayores y vieron que un señor efectivamente se estaba bañando en la laguna. Era el Señor de las Aguas que les habló y les dijo que lo sacaran. La gente lo sacó, lo lavó y desde ese tiempo celebraron la fiesta.

Base cultural de la fiesta

Una de las tradiciones más conocida de la parroquia Colonche es la celebración de su Santo Patrono “El Señor de Las Aguas”, fiesta religiosa considerada una de las más grandes e importantes de la localidad, que se remonta al siglo XII. Este festejo era fomentado con dinero pertenecientes a las cofradías y hermandades del curato.

Las festividades se realizan durante los días 28, 29 y 30 de mayo de cada año. Llegan a su cabecera parroquial pobladores de todas las comunas, sitios aledaños y zona urbana de la provincia e incluso de otros lugares del país. Llegan en buses repletos, camionetas y carros particulares. Todos creyentes de esta figura religiosa, a la que se le atribuyen poderes para la lluvia y prosperidad en los sembríos.

Está tradición se viene transmitiendo de generación en generación. Su celebración, se sigue conservando, a pesar de haber sufrido un bajón en la década de 1970 debido a un hecho suscitado con la imagen del santo donde estuvo involucrada la iglesia. Narran sus pobladores que la imagen fue prestada para un velorio en la comuna de Guale en la provincia de Manabí y que al ser devuelta ya no sería la original, esto ocasionó una disputa que dividió a los fieles de esa época. (Lino, 2020) Otros comuneros como Jorge Villao mencionan que llegó al pueblo gente rica que ofreció dinero para llevarse la imagen religiosa y así la vendieron (Pezo, 2016)

Este hecho coincidió con un período de sequía que afectó a todo el lugar, es por ello que sus devotos manifestaban que las lluvias se fueron porque le cambiaron la imagen de su santo, logrando incluso formar un comité para el rescate de la verdadera imagen del santo. Pero esto no cambió la fe de sus creyentes, ya que sin importar si la imagen es auténtica, conservan la fe y por ello llegan al lugar a pedir por sus necesidades.

Existen numerosos relatos de los prodigios del Señor de las Aguas. Aunque las épocas han cambiado, cada año esta figura religiosa recibe muchas ofrendas que le entregan sus fieles. Sus pobladores aseguran que antiguamente El Señor de las Aguas en su tiempo fue el más rico de la zona. Las limosnas y regalos que el Cristo recibía de los devotos eran abundantes y cuantiosas. (15 días, Temas89-92, & 94, 1993) Pág. 40

Se conoce en un estudio del (INPC, s.f.) que sus fieles creyentes llegaban de diferentes partes del país a entregarles las “mandas”, que consistía en replicas en miniatura de objetos que representaban el milagro concedido, que eran elaboradas de plata o de oro, éstas se colocaban en la imagen del santo los días de la fiesta. Las personas por un favor le piden al santo, de acuerdo a su necesidad y le ofrecen cabezas de ganado, caballos, grandes sumas de dinero y hasta piezas de oro, con el fin de que se cumpla el favor y también para darle las gracias por los favores recibidos. Por esta época los comuneros sembraban y criaban reses para donar a la iglesia en favor del Señor de las Aguas.

La veneración al Sr. De las Aguas manifiesta el sincretismo religioso que convoca a muchos creyentes y devotos y se inicia en el ancestral problema de la falta de lluvias y su invocación asociada al uso de la Spondylus, el mismo que asume una nueva forma camuflando el contenido del ritual precolonial en la devoción de la figura de este Cristo dador de aguas que impone la nueva cultura dominante. (Álvarez, 2002)

La imagen encierra gran valor cultural para el pueblo de Colonche, mucha gente expone ante el Santo sus preocupaciones, problemas económicos, familiares y acuden a él porque reciben muchos favores divinos, ya que por medio de esta imagen honran a Dios y Dios acoge las oraciones y peticiones de cada creyente.

Esta fiesta no tiene distinción de clase sociales, ya que se recibe gente pobre, sensible, humilde, campesina, y gente de alta clase social. Celebración que fusiona la fe y la diversión pagana. Durante el día rezan y en la noche sus pobladores se divierten en la fiesta.

Según Lino (2020) la veneración del santo se ha ido transmitiendo de generación en generación, aunque con el pasar del tiempo se ha ido perdiendo. Este año por la situación de la pandemia se celebró la fiesta religiosa de una manera diferente, utilizando los canales de Facebook para transmitir a sus fieles las ceremonias eclesiásticas. Aunque la celebración fue diferente sus pobladores aseguran que la devoción es la misma, ya que desean mantener la adoración a su Santo Patrono, tradición que mantienen de hace siglos atrás y que inició con la venida de los españoles cuando conquistaron los territorios de Colonchis

Descripción de la fiesta

En vísperas de la celebración de la fiesta religiosa por el Señor de Las Aguas, se realiza una novena, pregón, juegos deportivos, elección de reina y concursos tradicionales que aún conservan sus habitantes. Como coincide con la fecha de su parroquialización, se realiza desfile cívico y sesión solemne.

De acuerdo al INPC (s.f.) la novena consiste en que nueve días los feligreses de las diferentes comunas, pertenecientes a la parroquia Colonche, reciben en cada uno de sus lugares a la imagen de cuerpo completo del Señor de Las Aguas. Se realizan procesiones en la cabecera parroquial con misas programadas por el sacerdote y Consejo Pastoral. Una de las prácticas que se conservan está en el vestir al santo previo a la celebración de la fiesta.

Durante los días de la celebración varias familias se encargan de vestir a la imagen y le llevan hermosas prendas para que su santo luzca en los días festivos. Otros pobladores de la zona se encargan de arreglar las andas, donde se ubica al Señor de las Aguas para que recorra toda la localidad, pues ven en la imagen la representación de Cristo Jesús.

La banda del pueblo es la encargada de acompañar el santo en su recorrido, entre cánticos religiosos y populares. Antes de la celebración mayor, la imagen del santo patrono recorre cada una de sus comunas y recintos que conforman la parroquia, por la creencia de hacer llover en los pueblos. Antiguamente sus fieles elevaban oraciones, pidiéndole al santo que las lluvias lleguen para que cese la sequía y aumente el caudal del río para obtener buena cosecha, puesto que se tiene la creencia que la imagen, ocasiona gran cantidad de lluvias y reverdece los campos, cuando llega a un poblado, ocasionando que existiera suficiente agua. Esta devoción les garantizaba una buena cosecha de maíz y otros cultivos.

En los días de fiesta, llegan a Colonche gran cantidad de camionetas, rancheras, camiones, repletos de creyentes a celebrar a su Santo Patrono. Los fieles acuden con su familia. Llevan algo de dinero para la iglesia, como agradecimiento de manera voluntaria por los favores de salud y unión familiar, que aseguran haber recibido del Cristo Aguas.

El 29 de mayo se inicia con la misa que es el día de la parroquialización de Colonche. Luego hay desfile cívico y sesión solemne.

El 30 de mayo amanece con la procesión del Señor de Las Aguas a la que concurren los fieles que acompañan a la imagen en medio de la música de la banda de pueblo, con demostraciones de fe y regocijo. Luego de la procesión el pueblo concurre a la iglesia a venerar a su santo y pedir milagros en medio de canticos, alabanzas y rezos. Por la noche hay una misa y pasada la eucaristía se enciende la fiesta con juegos tradicionales, banda local, quema de castillo, juegos pirotécnicos, comida y baile público alrededor del parque central de la parroquia.

En la iglesia los feligreses se aglomeran alrededor de las dos imágenes del Señor de las Aguas que están en el lado izquierdo del altar. La figura del Santo Patrono, adornada con flores naturales y artificiales, se convierte en la imagen más tocada por los fieles, quienes después se santiguan en señal de protección. Le encienden velas y rezan para que los favores se les cumplan. Mientras unos disfrutan del baile, otros, los más creyentes, siguen en vigilia frente a la imagen con sus velas encendidas.

Niños, adultos y ancianos disfrutan de la música que interpretan los músicos de la banda del pueblo. Por otra parte, alrededor del pueblo se colocan pistas de baile donde sus habitantes disfrutan de las fiestas hasta el amanecer.

Cada año en Colonche existe una feria comercial durante la fiesta del santo. Los comerciantes llegan desde diferentes partes del país, para aprovechar la convocatoria del Señor de las Aguas y vender algo, por lo que ofrecen diversos productos a sus clientes como ropa, electrodomésticos, artesanías, juguetes y utensilios para el hogar.

En la cabecera parroquial de Colonche no se tiene restaurantes, pero esa noche de fiesta se ofertan una decena de pequeñas tiendas donde se ofrece diferentes tipos de comida como: secos, guatita, arroz con pescado, llapingachos, guatita. Con el pasar del tiempo la fiesta ha perdido sus tradiciones culinarias que se ofertaban antiguamente.

En estas fiestas se desarrollan eventos tales como: las vacas locas y pasada la media noche la tradicional quema de castillo, pero la celebración no termina ahí; continua hasta la madrugada, pues sus habitantes quieren disfrutar de la fiesta hasta el final, que para ellos es única ya que es la más sonada del pueblo. Los dos grandes días se festejan en las calles en medio de disjokey entre mezclas de baile y bailarines de moda, a los cuales se accede pagando una tarifa determinada.

Actores vinculados a la fiesta

Mayordomo

Antiguamente de acuerdo al INPC, s.f. , en la década de los 80, el Señor de las Aguas, tenía su propio ganado por las ofrendas que sus fieles entregaban a la Cofradía de la Iglesia de Colonche. Se conoce que hasta mil cabezas de ganado llegó a tener este santo, razón por la cual la Cofradía crea la figura de “mayordomo”, quién sería la persona encargada de cuidar este ganado y custodiar el santo. Luego de la fiesta del Señor de las Aguas se asignaba a un par de personas de Colonche que fueran mayordomos, para que viajen junto con la imagen mediana del santo del Señor de Las Aguas. Visitaban localidades de Daule, Pedro Carbo, Villao e incluso Manabí. Estos personajes regresaban en el mes de septiembre con el dinero recolectado de los devotos, de las localidades visitadas.

En este contexto (INPC, s.f.) describe la figura del “mayordomo” como a la persona que se le encargaba de custodiar el bulto del santo y de apoyar en la organización de la fiesta. En la época de mayor auge ecónomico por principios del siglo XX el mayordomo era la persona que tenía una posición económica privilegiada, aunque su capacidad de organizar la fiesta no dependía unicamente de esta condición, sino que también se evidenciaba por los vínculos que tuviera con las autoridades de la época y personajes que dieran realce a la fiesta.

La Vaca Loca

En las fiestas del Señor de Las Aguas es una tradición, que aparezca la “vaca loca” en el baile público antes de la quema de castillo. Se trata de una persona dizfrazado de vaca.

El disfraz se realiza con armazón de caña, madera o metal en forma de vaca, pero sin patas. Generalmente estos personajes suelen tener diferentes formas, colores, materiales y se forran con papel de colores y cintas. Cuando se arma la estructura a su alrededor se coloca varios cohetes y pirotecnia atados a una mecha que cuando se encienden las luces y los sonidos, entretienen a los asistentes con su gran colorido. Una persona carga en sus hombros a la “vaca loca” sosteniendo el disfraz por sus extremidades superiores haciéndole “bailar” y persiguiendo a los espectadores gritando. A este hecho se le llama la “quema de la vaca loca” (Castro, 2018)

El público disfruta, grita, corre y se abre paso cuando son perseguidos por los personajes disfrazados, provocando temor y alegría al mismo tiempo.

Platos tradicionales que se ofrecen en la fiesta

En la parroquia Colonche actualmente se ofrece todo tipo de comida en la celebración de la fiesta. Las comidas de los ancestros se han ido perdiendo con el pasar del tiempo. Entre los platos tradicionales de la parroquia se conocen los siguientes: sancocho de pescado, pescado asado, seco de venado y de chivo, seco de gallina, arroz moro, humitas, dulce de papaya, bollo de maduro, tambor de yuca, tortilla de maíz, bolón de verde, ceviche de pinchagua, tortilla de verde, pipián (sopa de maíz con patitas de cerdo) y la bebida la chicha de maíz. (Colonche, 2015)